martes, 16 de noviembre de 2021

 

LA ALCARRIA

TRAS LAS HUELLAS DE CAMILO JOSÉ CELA


Jueves, 11 de noviembre de 2021. Un nuevo viaje, esta vez de solo un día, con la Hermandad de Jubilados de los ministerios de Comercio, Economía y Hacienda. Vamos a visitar La Alcarria, y en concreto dos pueblos de la misma, Trillo y Gárgoles de Abajo.


Salimos a las 09:08, tenemos 136 Km hasta Trillo (Guadalajara), nuestro primer punto de destino. Somos 34 expedicionarios con Elena Romero, nuestra Vocal de Viajes al frente. Forman parte de la expedición, además, Merche, Rosalía, Sagrario, Trini, Carmina, Pilar Cerrada, Pedro García Mamolar y quien suscribe estas líneas. Hay bastantes caras nuevas que nunca había visto antes.


Como hago siempre, indico que las fotos que adornan este reportaje están todas hechas con un teléfono móvil Samsung Galaxy A40, y para la parte cultural me he servido de lo que nos reseñó nuestra guía, así como de la Wikipedia y de un artículo de Julio Martínez en la web henaresaldía.com

Trillo

Llegamos a Trillo poco antes de las 11:00. Nos dirigimos a reponer fuerzas con un café y a la cita con los baños.

Hemos quedado con la que va ser nuestra guía, la Srta. Niba, a las 11:30. Vestida de época, inicios del siglo XX, nos va a ir reseñando la historia de los lugares que recorreremos, intercalando a la vez la leyenda de sus antepasados, centrada en su abuela, de las que nos lee en cada parada que efectuamos trozos de un supuesto diario, a la vez que nos muestra fotos de época.


Tal como he comentado, y a fin de conocer un poco mejor a la Srta. Niba, incluyo un corto artículo de Julio Martínez de 3 de julio de 2020  en la web henaresaldía.com

Querido lector: Si un día llega a Trillo y se encuentra a una joven ataviada bajo los cánones de inicios del siglo XX, no se extrañe. Se trata de la Señorita Niba. Ella es la protagonista de una novedosa iniciativa, basada en la inmersión en la historia local a través de un viaje en el tiempo. Durante algo más de una hora, esta profesional explica los detalles monumentales de la villa. Y lo hace engalanada con indumentaria de época, a la vez que muestra fotografías centenarias del municipio. Así, el viajero puede observar las transformaciones habidas en este pueblo a lo largo de los últimos decenios, al mismo tiempo que aprende la historia. Todo un lujo.

La responsable de dar vida a la Señorita Niba es Miriam Batanero, una joven trillana que ha consagrado parte de su experiencia profesional a la dinamización turística. Además, cuenta con conocimientos de interpretación y danza, lo que la impulsó a hacer algo diferente. Busca transmitir la riqueza patrimonial de la localidad de manera original, sumergiéndose en lo pretérito. "Sobre todo en un pueblo como Trillo, que tiene tanta historia escondida", explica.


Para ello, aprovechó una colección de fotografías antiguas de la localidad –realizadas a inicios del siglo XX- que estaba en su poder. “Comenzamos a dar vueltas sobre cómo podía ser el personaje y, de esta forma, ofrecer una visión diferente”, rememora Batanero. Así surgió la idea. La protagonista aparece caracterizada como una chica de los años 20. Un trabajo en el que también se ha involucrado la madre de Batanero, encargada de analizar la indumentaria.

Se trata de una actividad innovadora. Tras una primera presentación, la Señorita Niba relata –a lo largo de una docena de paradas- el pasado de la localidad, haciendo –igualmente- algunas menciones a su abuela, otro de los referentes en sus relatos. De hecho, estas alusiones son la “adaptación de una historia personal. Así, hago un homenaje a mi abuela y a tantas otras mujeres que no lo tuvieron nada fácil en aquellos tiempos. Y que, a pesar de ello, salieron adelante con coraje y determinación”, confirma Batanero.


En definitiva, se repasa “el antes y el después de Trillo”. Algo que se hace de la mano de una serie de relatos e instantáneas históricas, que –tras ser mostradas- permiten comprender visualmente la evolución de la localidad. En cada una de las paradas del recorrido se escucha un <capítulo> del relato. “La gente se va quedando con mucha intriga”, confirman varios participantes en la propuesta.


El tiempo climatológico que nos acompaña es fabuloso, sol radiante, ni una nube y una temperatura sobre los 17 grados.

Antes de seguir adelante, una pocas palabras acerca del pueblo que visitamos: Trillo es un municipio español de la provincia de Guadalajara, situado a orillas del río Tajo, en la comarca de La Alcarria. Cuenta con una población de 1.335 habitantes. Se encuentra a 81 Km de la capital provincial y a 136 Km de Madrid.

Ya en la época romana Trillo era una población conocida, estando situada en la región fronteriza de Carpetania y Celtiberia. Su poblamiento se consolidó tras la Reconquista –a finales del siglo XI siendo monarca Alfonso VI el Bravo- cuando pasó a formar parte del Común de la Villa y Tierra de Atienza, rigiéndose por su fuero.


En 1325, el infante Don Juan Manuel construyó el castillo cuyas ruinas coronan el núcleo. A mediados del siglo XV pasó a la jurisdicción de los Condes de Cifuentes, hasta que en 1630, Trillo fue declarada villa con jurisdicción propia.

Durante siglos fue una próspera villa. Su decadencia llegó a principios del siglo XVIII con la Guerra de Sucesión. Se talaron sus montes y plantíos, se destruyeron ganados y colmenas, y fueron quemadas más de doscientas casas, lo que conllevó un drástico descenso de su población, de 1.752 a 82 habitantes.




Ya en el siglo XX, la construcción de la central nuclear de Trillo, inaugurada en 1987, supuso la revitalización económica del municipio. Actualmente es la central nuclear más moderna de España.



Comenzamos nuestra visita a Trillo a los pies del puente sobre el río Tajo, la construcción más emblemática de la localidad. Su origen se remonta a mediados del siglo XVI, si bien es posible que existiese una construcción anterior más antigua. Fue volado durante la Guerra de Independencia –como se puede leer en una inscripción en piedra- y aunque se intentó volar en la Guerra Civil, en dicha ocasión se consiguió evitar la demolición, tal como nos informó nuestra guía.


Recorremos el pueblo por el cauce del río Cifuentes de tan solo 12 Km, pero de un gran caudal, hasta desembocar en el Tajo justo aquí en Trillo; anduvimos durante algo más de dos horas, pasando por “La Casa de los Molinos”, quizá el edificio más antiguo del pueblo, mencionado por primera vez en una serie de documentos de la época del reinado de Fernando IV el Emplazado (1285-1312).


Asimismo, la cascada sobre el río Cifuentes constituye un paraje natural de gran atractivo.


Subiendo por el cauce del río llegamos a la cascada Cola de Caballo nombrada así por el Nobel Cela en su libro Viaje a la Alcarria (1946).

Al llegar a este punto hay que hacer un inciso. No puedo dejar de mencionar el citado Viaje a la Alcarria de Camilo José Cela, uno de los libros más deliciosos que jamás he leído. El ejemplar que poseo lo adquirí hace casi 50 años durante mi destino en Las Palmas de Gran Canaria. De él extraigo unos párrafos referidos a Trillo: 


Viaje a La Alcarria, Camilo José Cela

“…Al llegar a Trillo el paisaje es aún más feraz. La vegetación crece al apoyo del agua, y los árboles suben, airosos como en Brihuega. Esta tierra, con agua, parece una tierra muy buena; hasta se ve algún que otro castaño, de vez en cuando. A la entrada del pueblo hay una casa muy arreglada, toda cubierta de flores; en ella vive, ya viejo y retirado, cultivando sus rosales y sus claveles y trabajando su huerta, un veterano alpinista que se llama Schmidt. Schmidt, que piensa construirse una casa enfrente de la cascada del Cifuentes, poco antes de caer en el Tajo, fue un montañero famoso; en la sierra de Guadalajara hay un camino que lleva su nombre.


La cascada del Cifuentes es una hermosa cola de caballo, de unos quince o veinte metros de altura, de agua espumeante y rugidora. Sus márgenes están rodeadas de pájaros que se pasan el día silbando. El sitio para hacer una casa es muy bonito, incluso demasiado bonito.

El viajero busca un sitio para pasar la noche…”



Acabamos nuestro recorrido del pueblo en lo alto de un mirador desde donde se contempla una espléndida visión de la localidad, y por último en la Plaza Mayor, donde se encuentra el Ayuntamiento y la Iglesia Parroquial –una construcción de mediados del siglo XVI-. El templo tiene fábrica totalmente renacentista, construido con grandes sillares de piedra arenisca, formando una sola nave cubierta por un artesonado de madera.


Aquí, en la Plaza Mayor, junto a los muros de la iglesia, se despidió de nosotros, entre aplausos, la Srta. Niba, y los expedicionarios nos dirigimos al mismo local donde a media mañana habíamos repuesto fuerzas mediante la ingesta de cafés, a fin de dar cuenta de nuestro almuerzo, que refiero con detalle.

Comimos poco después de las 14:00 en el mismo restaurante que tomamos café, como ya he dicho. Son mesas de cuatro.

Pedro y yo nos sentamos con Sagrario y con otro compañero con el que ya habíamos compartido mesa en la excursión a la provincia de Cuenca.

De entrada nos sirvieron una ensalada de atún y pimientos muy bien aliñada y unos torreznos exquisitos, fuera de serie, los mejores que he tomado en mi vida; de plato fuerte cordero asado maravillosamente hecho, que se deshacía a penas cortarlo, con patatas panaderas; arroz con leche de postre, vino tinto, gaseosa y agua; café e infusiones. Una comida verdaderamente opípara, sensacional.

Gárgoles de Abajo



A las 15:45 salimos para Gárgoles de Abajo, situado a un par de kilómetros de Trillo, donde visitamos la granja Apícola MelimeluM www.alcarriabeecompany.es


Poco después de las 16:15 estamos en las instalaciones de la granja, y durante algo más de media hora nos muestran, con la ayuda del ordenador y una pantalla, las fases y secretos de la confección de la miel.


Al acabar nos ofrecen unos piscolabis de productos provenientes de la miel, incluyendo un orujo de miel riquísimo.


La mayoría de los expedicionarios adquiere tarros de miel y productos derivados de la misma.

Poco después de las 18:00 iniciamos el viaje de regreso llegando a Madrid sobre las 19:30.

Tomo un taxi y llego a casa sobre las 20:00 horas.

Sé que me voy a repetir, pero no puedo dejar de alabar el trabajo de Elena y el Grupo de Viajes para que esta excursión, fuera, una vez más, todo un éxito.

Juan José Alonso Panero

Las Rozas, 15 de noviembre de 2021

 

 

miércoles, 6 de octubre de 2021

 

CAMINO FRANCÉS EN

 NAVARRA, LA RIOJA Y BURGOS



Viernes 17 a jueves 23 de septiembre de 2021

Viernes 17 de septiembre

Dado que el Año Jubilar Compostelano va a durar desde principios de 2021 hasta el final de 2022, el Grupo de Viajes de la Hermandad de Jubilados de los Ministerios de Comercio, Economía y Hacienda con la Vocal de Viajes Elena Romero al frente ha programado un desplazamiento por España, que sustituye al habitual viaje estrella anual que se solía hacer al extranjero, que va a consistir en discurrir por el Camino Francés del Camino de Santiago, con la perspectiva de que este recorrido que realizamos ahora es la primera etapa, y en 2022 realizaremos la que será la segunda para llegar hasta Santiago de Compostela.




Salimos de Madrid con buen tiempo a las 09:13 con 13 minutos de retraso y paramos a mitad de camino para tomar café e ir al baño. Somos 35 viajeros, 30 mujeres y cinco hombres. Formamos parte de la expedición, además de Elena Romero y Esperanza, la guía que nos acompañará durante todo el viaje, y de quien esto suscribe, mi amigo Pedro García Mamolar, y otros viajeros ya habituales como Juan Carmona y su esposa Victoria, Rosalía, Laura, Pilar Cerrada, Sagrario, Merche y en esta ocasión un matrimonio con el que Pedro y yo haremos buena amistad, Emilia y Pedro. El chófer que nos guía y que demostraría una pericia fuera de serie se llama Rafael.




Antes de adentrarme en nuestro periplo viajero, indico, como hago siempre, que las fotos que adornan este reportaje están todas tomadas con un teléfono móvil Samsung Galaxy A40Más de un compañero de viaje me ha preguntado qué ha sido de mis cámaras fotográficas. La Contax G2 analógica con objetivos Zeiss y la Leica M9-P digital duermen el sueño de los justos desde hace ya un par de años y solo despertarán si algún acontecimiento especial lo amerita. Los años no pasan en balde y mi cuello y espalda llevan malamente el peso de un par de kilos, así que ahora me conformo con las fotografías que mi teléfono móvil me proporciona, no tan brillantes como las de las cámaras profesionales, pero al menos, eso creo, dignas para poder adornar este relato.

Además de las mías están las fotos que benéficamente me han aportado Elena Romero, Pilar Cerrada y Emilia García.

En cuanto a la parte cultural, me he valido para redactarla de la Wikipedia, de los folletos editados por las Consejerías de Turismo de las Comunidades de Navarra, La Rioja y Castilla y León, además de lo que nos contaron los muy buenos guías que tuvimos.

Tudela



Llegamos Tudela a las 13:30. Comimos una sopa de pescado muy buena y de segundo un plato ridículo con dos brochetas y puré de patatas. De postre tarta de queso con crema de cerezas. Vino y agua.




Tudela, situada en la Comunidad Foral de Navarra es la segunda población de la Comunidad tras Pamplona, con 37.000 habitantes en 2020.




A las 15:15 salimos para dar un paseo por la ciudad con el guía local que llevamos que se llama Esteban. Visitamos en primer lugar la plaza de los Foros o plaza nueva, francamente bonita. Luego fuimos al palacio de Huarte que examinamos en su interior y después llegamos a la plaza Vieja donde está la catedral que tan solo vislumbramos en su exterior, ya que estaba cerrada. El tiempo climatológico es muy bueno.




El palacio del Marqués de Huarte es una espléndida residencia barroca de mediados del siglo XVIII. Tiene dos fachadas, en la calle Mercadal y en la de Herrería. Está situado en el casco antiguo de la ciudad y actualmente acoge la Biblioteca y el Archivo Municipal. En él se conserva la carroza de los Marqueses de San Adrián, una berlina del estilo rococó francés del siglo XVIII.



La catedral de Santa María, que como queda dicho solo vislumbramos en su exterior, es un templo tardo románico inspirado en la arquitectura cisterciense. De grandes dimensiones, se comenzó a construir a finales del siglo XII, utilizando algunos de los cimientos de la Mezquita Mayor (siglos IX a XI). Como las orientaciones de los dos templos no coincidían, la mezquita fue demolida para edificar el nuevo templo y solo se aprovecharon algunos de sus cimientos. Inicialmente sirvió como colegiata, siendo elevada a catedral por Pio VI a instancias de Carlos III en el siglo XVIII cuando la diócesis de Tudela se segregó de la vecina Tarazona.

Pamplona




Salimos de Tudela y llegamos a Pamplona sobre las 18:30. Me adjudican la habitación 313 en el Hotel Maisonnave, 4 estrellas, situado en pleno centro de la ciudad a 100 metros escasos del Ayuntamiento.

Pamplona (cooficialmente en vascuence Iruña) cuenta con una población de 200.000 habitantes, alcanzando su área metropolitana 330.000

Cenamos en el hotel a las 20:30, hora que seguiríamos cumpliendo las tres noches que pernoctamos en Pamplona. La cena consistió, de primero una ensalada de patatas con judías, luego ensalada de tomates y lechugas para cuatro y de plato principal bacalao en su salsa con patatas, muy rico; de postre un browny aceptable. Vino tinto, blanco y agua. Como ya haríamos prácticamente durante todo el viaje, Pedro y yo compartimos mesa con Emilia y Pedro.

Sábado 18 de septiembre

Desayunamos a las 08:00 y salimos del hotel andando para visitar Pamplona con una guía fantástica, Maite.

Fuimos primero a la plaza del Ayuntamiento, sin lluvia, pero nublado. Me emocionó particularmente este lugar, que en el transcurso de los años que se pierden en el tiempo, siempre procuré ver por televisión en el famoso chupinazo de San Fermín en el mes de julio.




El Ayuntamiento se construyó tras el Privilegio de la Unión en tierra de nadie, para evitar rivalidades, pero cerca de la confluencia de los tres “burgos”. El siguiente edificio, barroco del siglo XVIII, fue derruido en 1957 y solo se conserva la fachada. Desde el segundo piso del ayuntamiento, cada 6 de julio, a las 12 del mediodía, se lanza el cohete chupinazo y el encargado de lanzarlo grita: “Pamplonesas, pamploneses ¡Viva San Fermín! ¡Gora San Fermín!




A la media hora comenzó a llover, fuimos por la calle Mayor, chispeando, viendo el palacio de los Ezpeleta por fuera, y nos dirigimos a la




Iglesia de San Saturnino (San Cernin o San Sernin) que inicialmente se edificó en estilo románico y tras sufrir las consecuencias de la guerra entre los burgos, fue reedificada a finales del siglo XIII en estilo gótico. Tiene dos torres que le dan al templo un carácter de fortaleza. Su fachada principal que da al norte, está formada por un amplio atrio, compuesto por arcos ojivales o apuntados y una bóveda del siglo XVI. También tiene una portada en cuyos capiteles se representan escenas de la pasión e infancia de Cristo, y a los lados de su arco hay colocadas sendas tallas de Santiago Peregrino y San Saturnino.

En el lugar donde estuvo el claustro se construyó en el siglo XVIII la Capilla de la Virgen del Camino.

Continuamos luego, bajo la lluvia hasta la




Iglesia de San Lorenzo. De la primitiva iglesia medieval de estilo gótico apenas quedaron vestigios, tras una reforma neoclásica llevada a cabo en el siglo XIX. Hasta 1901 todavía conservaba el gran torreón defensivo medieval y una portada barroca, pero en ese año fueron derribados y se construyó una nueva fachada diseñada por Florencio Asoleaga. Entre sus dependencias se encuentra una capilla barroca dedicada a San Fermín, edificada a comienzos del siglo XVIII. En ella se encuentra la imagen del santo, que se lleva en la procesión el 7 de julio durante los Sanfermines.




Cuando salimos de la iglesia llovía a cántaros. Nos dirigimos a la




Catedral de Santa María. Está situada en La Navarrería, que es el punto más alto y más antiguo de la ciudad. De origen desconocido, desde 1023 fue sede episcopal comenzando su remodelación que acabaría en 1100 para ser consagrada en 1124. Tras ser declarada en ruina en 1300 comenzó su reconstrucción gracias al impulso del rey de Navarra Carlos III y el cardenal Martín de Zalba, obispo del lugar.




De estilo gótico la catedral destaca por su valor artístico, ya que está considerado como el conjunto monumental gótico más importante de Navarra. Sobresalen en la torre norte tres campanas del siglo XVI; la función de la mayor de ellas, llamada de “María”, data de 1584 y es tañida únicamente en circunstancias de especial solemnidad. En su interior se observa una gran unidad de estilo dentro del gótico.




Posee planta de cruz latina con una nave central de dos cuerpos y crucero de su misma altura, dos naves laterales, girola y capillas laterales todas ellas con bóveda de crucería simple. En el presbiterio, bajo un baldaquino gótico moderno, está la imagen de Santa María la Real, talla románica chapeada de plata, ante la cual juraban su cargo los reyes de Navarra, encontrándose en medio de la nave central el mausoleo de Carlos III y su esposa Leonor.




Por dentro, encontramos la catedral francamente impresionante. En su exterior, como muy bien nos dijo la guía, se asemeja más a un palacete de ópera o el edificio de un banco. Tiene un museo muy interesante y todo muy bien cuidado.

Salimos de la catedral lloviendo, nos dirigimos de nuevo a la plaza del Ayuntamiento, y estuvimos viendo la calle Estafeta por donde corren los toros.

Luego sobre las 11:45 tuvimos tiempo libre y Pedro y yo nos fuimos a la plaza del Castillo con Emilia y Pedro. Tomamos unos cafés y a las 12:30 nos reunimos todo el grupo en el templete que hay en la plaza. 

La Plaza del Castillo es fruto de construcciones de distintas épocas, por lo que puede apreciarse la gran variedad de estilos que tienen los edificios que la circundan. Es el espacio urbano por excelencia, ámbito que ya existía en la edad media. Una función clave de la plaza ha sido su papel de coso taurino, ya que prácticamente todas las corridas de toros se han desarrollado en ella desde 1385 hasta que en 1844 se construyó la plaza estable.




En 1836, las Carmelitas Descalzas se vieron obligadas a abandonar el convento con la Desamortización de Mendizábal y en el lugar que ocupaba se construirían el Palacio de la Diputación, el antiguo Crédito Navarro y el Teatro Principal, todos de estilo neoclásico. En 1859 se instauró el Hotel La Perla, y entre 1880 y 1895 iniciaron su andadura el Casino Principal y el Café Iruña, inmortalizado por Hemingway. Con la construcción del Segundo Ensanche el Teatro Principal tuvo que retroceder para abrir paso, en 1931, a la apertura de la ciudad. Desde 1943 un quiosco de piedra ocupa el centro de la plaza.

Roncesvalles




Hacia la una, bajo la lluvia, salimos hacia Roncesvalles por una carreta de montaña con mucha curva;  llegamos como una hora más tarde. Sobre las 14:00 comimos, de primero una sopa de cardos, patatas, guisantes y habichuelas bastante buena y de segundo cordero asado con patatas asaz rico; de postre pastel vasco, una especie de magdalena con chocolate por fuera. Vino y agua.




El tiempo nos acompañó, ya que no llovía, apenas algún ligero chispeo.

Roncesvalles (en vascuence Orreaga y oficialmente Orreaga/Roncesvalles) está situado en la merindad de Sangüesa a 47 Km de Pamplona. Su población en 2019 era de 22 habitantes, 12 hombres y 10 mujeres.




Iglesia de la Real Colegiata de Santa María. Después de comer visitamos la Colegiata, el mejor ejemplo navarro  del gótico, no solo francés, sino del más puro gótico similar al de la región parisina conocida como Isla de Francia. Acoge una preciosa imagen de la Virgen del siglo XIV.




El templo actual se construyó gracias a Sancho el Fuerte (1194-1234) quien lo eligió como lugar de enterramiento. No hay datos concretos sobre la construcción de la iglesia, pero se sabe que fue a principios del siglo XIII, entre 1215 y 1221.




La Colegiata sufrió importantes desperfectos, ocasionados principalmente por varios incendios entre 1445 y 1626. A comienzos del siglo XVII, su estado de deterioro y casi abandono propició su reconstrucción, que abarcó todo el recinto colegial, especialmente a la iglesia y al claustro. Se enmascaró el interior gótico y se le dio forma barroca, salvo en el presbiterio y el tramo de nave que le precede, donde quedaron a la vista los elementos góticos.




Caminando tan solo unos metros visitamos la capilla del Santo Espíritu o Silo de Carlomagno del siglo XII, que se encuentra en el lugar donde se cree que habría clavado Roldan su espada después de ser derrotado en la batalla de Roncesvalles.

A las 16:45 salimos hacia Pamplona donde llegamos a las 18:00. Ha habido mucha gente que iba a misa esta tarde.

La cena en el hotel consistió en ensalada de tomates con lechuga, huevos duros, aceitunas y espárragos; de segundo, redondo de ternera relleno de huevo con patatas fritas. De postre un tazón de yogur con maracuyá y mango exquisito, Vino y agua.

Domingo, 19 de septiembre

Desayunamos a las 07:30 y salimos a las 09:00 hacia el monasterio de Leire; sigue con nosotros de guía, Maite.

Monasterio de Leire





Es uno de los conjuntos monásticos más importantes de España por su relevancia histórica y arquitectónica. Entre los diferentes edificios que lo componen, existen ejemplares del románico muy destacados por pertenecer a un periodo muy temprano del mismo y por su excelente estado de conservación. Se encuentra en Navarra próximo a la frontera con Aragón.




Leire fue fundado como un monasterio benedictino, aunque posteriormente pasó a estar en manos de monjes cistercienses. En la actualidad, el conjunto pertenece a la Comunidad Foral de Navarra, que lo ha cedido a sus primitivos moradores, la orden benedictina, para su cuidado y funcionamiento.





La iglesia de San Salvador de Leire constituye el elemento arquitectónico principal del monasterio. Mantiene partes de la construcción románica de los siglos XI al XII, como la cripta, los ábsides, la torre, la nave principal y el pórtico, conocido como Porta Speciosa, sobre la que se superponen elementos posteriores, como la bóveda gótica, el panteón de los reyes de Pamplona y una pequeña capilla, también gótica, que data de los siglos XIV y XV.



 

Entre la imaginería destacan la imagen de Santa María de Leire, una talla de un Cristo muerto en la cruz del XIV y el retablo de Santa Nunilo y Santa Alodia del XVII.




La cripta de Leire no es una cripta al uso. No llega a ser subterránea ni hay evidencias de que se haya destinado nunca a ser un lugar de enterramiento. Destaca por sus dimensiones y altura, así como por sus grandes capiteles, que se alzan sobre pequeñas columnas.




Fue construida para nivelar el terreno donde se alzaría la iglesia y servir como cimiento a la misma. Es de forma cuadrada a semejanza de la cabecera del templo, por lo que dispone de tres ábsides circulares y cuatro naves iguales cubiertas por bóvedas de cañón. Se construyó en piedra caliza con cuarzo y hierro, lo que le ha dado una resistencia que le ha permitido su buen estado de conservación. La puerta de entrada, la más antigua de todo el conjunto monástico, es de un románico naciente, muy sobrio y rudo. La cripta, junto a la iglesia, fue consagrada en 1057.




Antes de abandonar Leire no puedo resistirme a narrar la leyenda de San Virila, que nos fue relatada detalladamente por nuestra guía Maite.

Virila fue un religioso y santo nacido en Tiermas (Zaragoza) en 870 y, si no se atiende a la leyenda que se cierne sobre su persona, debió morir en el monasterio en 950. La leyenda cuenta que cierto día primaveral, el abad Virila decidió dar un paseo por los bosques cercanos al monasterio, mientras meditaba sobre el gozo de la eternidad. En ello, un ruiseñor le distrajo hacia una fuente donde se quedó dormido. Al despertar encontró el camino de vuelta al monasterio tras una larga búsqueda, pero quedó contrariado al ver que el tamaño de la iglesia y otras dependencias era mayor de lo que él recordaba. Cuando entró en el monasterio, nadie supo reconocerlo ni él pudo identificar a ninguno de los monjes que ahora ocupaban Leire, así que decidieron buscar en el archivo del cenobio y descubrieron que se trataba del abad Virila, desaparecido en el bosque trescientos años antes.

Esta narración está cargada con una moraleja religiosa: “si el canto de una simple ave puede entretener durante tres siglos a un hombre, ¿qué no puede hacer la luz divina del Salvador?”.

Entonces, un ruiseñor entró en la abadía con un anillo en el pico, lo colocó en el dedo de San Virila y este volvió a ser abad.

Tras visitar Leire, que creo poder decir, impactó a toda la expedición, nos dirigimos a

Sangüesa




Municipio de Navarra a 45 Km de la capital Pamplona, su población en 2017 era de 5002 habitantes.




Estuvimos paseando por el pueblo, en cuyo recorrido pasamos ante la iglesia de San Salvador, edificio gótico construido entre los siglos XIII y XIV. La iglesia está cerrada desde 2001 por problemas estructurales en el coro.




Seguimos hacia el punto principal de nuestra visita a esta localidad, la iglesia románica de Santa María la Real. Fue donada en 1131 por Alfonso I el Batallador a la orden de San Juan de Jerusalén. Se trata de una pequeña iglesia románica de tres naves. La torre de planta octogonal es gótica, de los siglos XIII-XIV.





Lo que ha hecho famosa a esta iglesia es la gran portada románica, que constituye una de las obras más interesantes y complejas del arte medieval navarro. En su interior el retablo mayor es plateresco (1550-1570), de Jorge de Flandes, que residió en Sangüesa desde 1554 hasta su muerte en 1586.




Seguimos camino hacia Sos del Rey Católico, donde hemos llegado a las 13:30 y nos hemos dirigido directamente a comer, de primero un buen plato de alubias muy rico y de segundo conejo con mucho hueso; de postre había para elegir natillas, helado y fruta. Vino y agua. Acabamos sobre las 15:15 y la mayoría de la gente se fue a hacer una corta visita de una media hora al pueblo; junto con dos o tres personas más me quedé en una placita cerca de donde aparcó el autobús. Estaba francamente cansado. 

Javier




Salimos hacia Javier donde llegamos en unos 40 minutos. Aquí hicimos una foto de grupo que quedó muy bonita. Visitamos primero la iglesia y luego el castillo. 

Javier es una villa y municipio de la Comunidad Foral de Navarra, situado en la merindad de Sangüesa, siendo su población en 2017 de 102 habitantes. Es famosa principalmente por ser la villa que vio nacer a San Francisco Javier en el castillo homónimo.




El castillo de Javier está situado en una loma de la localidad de Javier, a 52 Km de Pamplona y 6 Km de Sangüesa. Data del siglo X. En este castillo nació y vivió San Francisco Javier, hijo de los señores de Javier, y de aquí tomó el nombre con el que se conocería como misionero. Es un lugar de peregrinación, especialmente a principios de marzo, en las llamadas Javieradas, Es Bien de Interés Cultural desde 1994.




A finales del siglo XIX el castillo estaba prácticamente en ruinas, y por iniciativa de sus propietarios María del Carmen de Aragón-Azlor, duquesa de Villahermosa, y su marido José Manuel de Goyeneche, conde de Guaqui, se comenzaron las obras de restauración.




Ya a principios del siglo XX, la duquesa de Villahermosa donó el castillo y la basílica que se había edificado adosada a él, a la Compañía de Jesús con la condición de que lo mantuvieran tal y como se le entregó. En la cripta de la basílica descansan los restos de quienes contribuyeron a la reconstrucción del castillo y erección de la basílica

Llegamos a Pamplona sobre las 18:15, El autobús nos dejó en el sitio de siempre y fuimos andando hasta el hotel. Me quedé descansando hasta la hora de la cena, 20:30.

Cenamos primero una sopa de mariscos, ensalada de lechuga y tomates para cuatro y de segundo, san Jacobo con patatas fritas; de postre un sorbete de limón con cava muy rico. Como las noches anteriores Pedro y yo cenamos con Emilia y Pedro. 

Lunes, 20 de septiembre

Desayunamos a elección, desde las 07:30, hora en que lo hizo mi amigo Pedro así como yo; luego, a las 08:45 había que bajar con la maleta hecha ya que hoy dejábamos el hotel a las 09:00.

En primer lugar nos hemos dirigido a

Estella




Estella (Lizarra en vascuence) se encuentra ubicada en la Comunidad Foral de Navarra; su población era en 2017 de 13.707 habitantes, siendo el comercio su principal sector económico. Por ella pasa el Camino de Santiago en el tramo entre la capital de la comunidad, Pamplona, de la que dista 44 Km, y Logroño, capital de la Rioja.




Cuenta con un importante patrimonio monumental, por el que es también conocida como la Toledo del norte, entre el cual destaca la iglesia de San Pedro de la Rúa, la de San Miguel, la del Santo Sepulcro y el Palacio de los Reyes de Navarra, que es el único ejemplo de románico civil en la Comunidad.




Paseamos por sus calles donde, aunque parezca mentira, aún se respira el eco de las Guerras Carlistas, y nos detuvimos a admirar, tan solo en su exterior, los dos monumentos que cito a continuación:





Iglesia de San Pedro de la Rúa. Este monumento, con un precioso claustro románico, ya en el siglo XIII era conocido como San Pedro el Mayor. La fachada data del siglo XIII y el interior presenta formas constructivas originadas en el último cuarto del siglo XII; las naves son del siglo XIII y el ventanal de tracería gótica, situado en el muro norte de la iglesia, en su primer cuerpo y dentro de la torre, del siglo XV. Cobija diversas obras entre las que cabe destacar el retablo de la Virgen del Rosario (primera mitad del siglo XVII), en cuya hornacina se encuentra una imagen de la Virgen de la O, datable en el siglo XIV.




Aquí, al pie de la escalinata que asciende hasta la iglesia, nos hicimos otra foto de grupo que quedó francamente bonita.




El Palacio de los Reyes de Navarra es el único edificio románico de carácter civil existente en Navarra, el cual fue declarado Monumento Nacional en 1931. Fue construido en la segunda mitad del siglo XII, situado en la Plaza de San Martín, antigua entrada de peregrinos. La fachada principal consta de dos pisos construidos en sillería que quedan divididos en altura por una cornisa. El cuerpo inferior constituye una galería de cuatro arcos enmarcados por columnas adosadas al muro. Desde 1991 aloja el museo del pintor Gustavo de Maeztu.

Bodegas Campo Viejo, Logroño




Nuestro siguiente periplo fue las instalaciones de esta bodega riojana situadas en las afueras de Logroño que nos impactó prácticamente a todo el grupo. Lo que yo pueda decir se quedaría corto, y creo que hablarán mejor que mis palabras las fotos que adornan el artículo. No obstante lo dicho, tengo que apuntar que mi primo Pepe Alonso, un auténtico conocedor del tema, me dijo que efectivamente las Bodegas Campo Viejo tienen unas grandes instalaciones, pero que ¡él las conoce aún mejores!




Tras la visita a la bodega, nos fue servida a todo el grupo, cómodamente sentados, una degustación de dos tipos de vinos, acompañados por unas tapas, más que abundantes, de queso, chorizo y salchichón.




Antes de abandonar el lugar, y no fui el único, adquirí media docena de botellas de un Gran Reserva a muy buen precio que me enviarán por correo.

Después de escrito el párrafo anterior, añado que justamente hoy me ha llegado la media docena de botellas.

Nuestra siguiente etapa fue

Laguardia




Municipio de la provincia de Álava, situado a 64 Km de la capital, Vitoria. Está enclavado en la comarca de la Rioja Alavesa y contaba con 1.454 habitantes en 2020. Efectuamos la visita de la localidad acompañados por una guía muy despierta, Andrea.




Laguardia se halla en un altozano y está rodeada por una muralla que mandó levantar Sancho el Fuerte de Navarra. Todavía se conservan cinco puertas de acceso a la ciudad. Sus calles y rincones conservan un gran sabor medieval. Su economía está basada en la industria del vino, con elaboración propia y numerosas bodegas. Su amplio patrimonio le ha permitido pertenecer a la asociación de Los pueblos más bonitos de España, siendo la única localidad del País Vasco en la asociación.




Estuvimos admirando su preciosa Plaza Mayor, porticada, centro de la villa. En ella se encuentran el ayuntamiento antiguo y el nuevo. Este último, construido en el siglo XIX, muestra en su fachada el escudo de la villa y un reloj con unos autómatas que al dar las horas danzan al ritmo de un pasacalle típico de las fiestas de la localidad.




A continuación nos dirigimos a Logroño, donde íbamos a tener nuestro almuerzo en un magnífico restaurante de “nouvelle cuisine”.

La comida consistió en una copichuela de salmorejo de entrada, seguido por pisto riojano con huevo al horno a baja temperatura, y secreto ibérico con patatas brillantes; de postre flan de café con nata, vino tinto y blanco y agua. Todo realmente exquisito.

Logroño

Tras la comida teníamos tiempo libre hasta las 17:30 para dar una pequeña vuelta por el centro de la ciudad, pero lamentablemente al salir del restaurante llovía a cántaros, de modo que Pedro y yo tuvimos que limitarnos a tomarnos unos cafés a resguardo de la lluvia.

Seguimos al punto siguiente, San Millán de la Cogolla (La Rioja),  donde íbamos a pernoctar dos noches  en la Hostería de San Millán, también cuatro estrellas, aunque ya algo demodé y necesitada de una renovación. Me han dado la habitación 202.

Cenamos a las 20:30 crema de verduras con picatostes muy rica, de segundo merluza a la romana con ensalada de lechuga y tomate y mayonesa y de postre una tarta de chocolate con nata francamente buena, vino tinto y agua.

Martes, 21 de septiembre

San Millán de la Cogolla

El municipio, situado en la comunidad autónoma de La Rioja, contaba en 2020 con 229 habitantes. Aquí, nuestro objetivo prioritario era visitar los monasterios de Suso y de Yuso, ubicados en esta localidad.




Desayunamos a las 08:45 y salimos formando dos grupos, debido al   número de visitantes autorizados, hacia el Monasterio de Suso. Pedro y yo fuimos en el primer grupo a las 10:15. Recorrimos la pequeña distancia existente, un par de Km, por una estrecha carretera de montaña, entre el pueblo y el monasterio, en un pequeño microbús. Dispusimos de una guía del monasterio.




San Millán de la Cogolla (La Rioja) es como se conoce el conjunto formado por un núcleo de población junto con los dos monasterios que tiene su origen en la comunidad que formó un santo eremita de nombre Millán que vivió 101 años (473-574) en unas cuevas de la Sierra de la Demanda dedicado a la oración. Suso del latín sursum significa “arriba”, como se conoce el monasterio más antiguo y Yuso del latín deorsum, significa “abajo”. Ambos fueron declarados en 1997 por la UNESCO Bienes Mundiales, Patrimonio de la Humanidad.




Monasterio de Suso. Del actual monasterio de Suso, construido entre los siglos VI al XI, quedan vestigios importantes de los diversos momentos históricos por los que atravesó: las cuevas rupestres donde vivían los eremitas, el primitivo cenobio visigótico, la ampliación mozárabe y por último románica.




El acceso al monasterio se realiza a través del portaello, cantado por Gonzalo de Berceo, el primer poeta conocido de la lengua castellana. Allí se encuentran las tumbas de los infantes de Lara y de su tutor Nuño acompañando a las tres reinas navarras.




Por el arco mozárabe con capiteles de alabastro que nos recuerda a la época califal cordobesa del siglo X decorados con dibujos con motivos vegetales, geométricos, etc. nos adentramos en el monasterio mozárabe con tres grandes arcos de herradura. Al fondo observamos el resto de la primitiva construcción visigótica.




Glosas Emilianenses. San Millán fue centro de poder político y cultural en el Medievo. En su escritorio se escribieron las primeras palabras en castellano y en vascuence. En las glosas Emilianenses un monje tradujo el latín al lenguaje coloquial. En la actualidad diversos investigadores las han datado en el año 964.




Cuando ha bajado el segundo grupo que visitó Suso nos hemos dirigido a pie, ya que se encuentra en el complejo donde también se ubica la hostería, todos juntos, al monasterio de Yuso, también con una guía del monasterio.




Monasterio de Yuso. El origen del monasterio se refleja en una leyenda que narra cómo el rey García, el de Nájera, ordenó el traslado de los restos de San Millán desde Suso al monasterio de Santa María la Real de Nájera. Los bueyes que tiraban de la carreta se detuvieron en el valle como si los restos del santo no quisieran abandonarlo, construyendo en ese lugar el actual monasterio de Yuso. Pero sería finalmente el rey Sancho X el que trasladó los restos de San Millán desde Suso al nuevo templo que se había construido en el valle, un monasterio románico del X y XI sobre el que se edificó entre los siglos XVI y XVII el actual edificio de Yuso por los abades benedictinos.





Pudimos admirar el claustro bajo; la sacristía que es una de las más bellas de España, antigua sala capitular que comenzó a usarse como tal hacia 1693, donde los frescos del techo del siglo XVIII conservan sin haber sido restaurados toda la riqueza del color original; 





la iglesia con el grandioso retablo del altar mayor que contiene un lienzo de Fray Juan de Ricci, de la escuela del Greco, que representa a San Millán a caballo en la batalla de Hacinas y la extraordinaria rejería de Sebastián de Miranda de 1676; 




la sillería del coro bajo que fue realizada por un tallista flamenco en torno a 1640 y la estantería de los cantorales que conserva en su haber veintinueve volúmenes copiados entre 1729 y 1731 que recogen todo el año litúrgico.




En la Sala de Exposiciones destacan las réplicas de los marfiles románicos de las arquetas relicarios de San Millán del siglo XI y de San Felices del siglo XII.

Construido por monjes benedictinos, tras la desamortización de Mendizábal y exclaustración del XIX, son actualmente los frailes Agustinos Recoletos los que mantienen el espíritu del monasterio.

Nájera

Cuando hemos acabado la visita nos fuimos a Nájera (La Rioja) donde tuvimos una comida de degustación, fantástica, en un restaurante de una bodega, Cuna de Reyes, en las afueras de la localidad. De primero patatas a la riojana y revuelto de huevos a la riojana, de segundo bacalao a la riojana con patatas y albóndigas a la riojana. De postre, flan de huevo de la casa con helado de café, riquísimo, vino de la casa, Cuna de Reyes y agua.




Después de comer nos hemos dirigido a Nájera donde hemos visitado el monasterio de Santa María la Real con una guía local, Gloria.




El monasterio fue fundado por el rey Don García Sánchez III “el de Nájera” y su esposa doña Estefanía de Foix que lo mandaron construir en 1052.




En 1079, Alfonso VI de Castilla incorporó a la orden benedictina de Cluny al monasterio junto al grupo de clérigos que lo habitaban desde su fundación en el que permanecieron hasta la desamortización de Mendizábal en 1835. Desde 1895 es una comunidad de frailes franciscanos quien rige el monasterio.





La actual iglesia del monasterio data de 1516 y consta de tres naves y crucero. En la entrada se encuentra el Panteón Real que alberga doce sepulturas de dos dinastías, la de los “Abarca” o “Jimena” de los siglos X y XI y la de García Ramírez “el Restaurador” siglos XII y XIII. Al lado se encuentra el Panteón de los Infantes con trece sepulturas renacentistas.




Destacan también el coro de principios del siglo XVI con sillería tallada en madera de nogal, obra maestra del gótico florido y el Claustro de los Caballeros lugar de enterramiento de muchos nobles, destacando entre otros el sepulcro de don Diego López de Haro, fundador de Bilbao y de su esposa doña Toda Pérez de Azagra.

Hemos acabado sobre las 17:15 y hemos llegado al hotel en San Millán de la Cogolla a las 18:00. Apuntar que hoy disfrutamos de un tiempo magnífico.

Cenamos a las 20:30. De primero una ensalada muy completa con lechuga, tomate, aceitunas, huevo y espárragos; de segundo nos tocó de nuevo bacalao a la riojana y de postre flan de huevo con nata, vino y agua.

Miércoles, 22 de septiembre

Castrillo del Val

Dejamos el hotel de San Millán a las 09:00 con las maletas y nos dirigimos al monasterio de San Pedro de Cardeña. Este legendario cenobio está situado en el municipio de Castrillo del Val, 797 habitantes en 2020, a poco más de 10 Km del centro de Burgos.  Está considerado como Bien de Interés Cultural y como el monasterio benedictino más antiguo de España. 




En nuestra visita disfrutamos, y nunca mejor dicho, de un guía muy especial, un monje cisterciense que frisaba los cincuenta, llamado Román, madrileño según nos dijo, que parecía sacado de una película, pues su bonita voz con perfecta dicción, apostura y soberbia figura embutido en un perfecto hábito, hacían de él un actor de cine pero al mismo tiempo afable, gentil y cercano trasladado a la realidad. Su sabiduría nos informó de todo lo referido a la historia del lugar. Como anécdota lamento no poder incluir ninguna foto del monje, pero el padre Román nos indicó que los monjes no estaban autorizados a posar en fotografías, y yo no me atreví a desobedecer tal disposición. Tras esta larga disquisición, entremos en materia.




El monasterio se habrá fundado antes de 902 cuando el conde de Lantarón y de Cerezo, Gonzalo Téllez y su esposa Flámula realizaron la primera donación documentada al cenobio.

En los siglos IX o X sus monjes fueron martirizados por los musulmanes, canonizados en 1603 y conocidos como los “Mártires de Cardeña”. El monasterio gozaba de gran popularidad con gran afluencia de devotos, entre los que se encontraba el rey Felipe III y su esposa Doña Margarita de Austria.

El 1 de febrero de 1967 un violento incendio destruyó las tres cuartas partes del monasterio, habitado desde 1942 por la abadía trapense de Nuestra Señora de los Mártires. En 1945 se eleva al rango de priorato y en 1948 logra el título de abadía.




Desde la sala capitular, que data del siglo XIII, se divisa a través de grandes cristaleras el Claustro de los Mártires, románico del siglo XII. 




Para construir la iglesia de tres naves se destruyó la románica, aunque afortunadamente se salvó la torre, legítimo recuerdo cidiano. Reedificada en el siglo XVI, consta de tres naves, con una capilla aneja denominada capilla de El Cid, ya que allí fue enterrado, y permaneció antes de su traslado a la catedral de Burgos. La fachada de la iglesia es de estilo barroco.





El Panteón Real, es conocido popularmente como “El Escorial burgalés”. En las paredes de esta estancia llamada “Capilla de los Héroes”, hay 29 nichos con inscripciones de nombre de reyes y familiares de El Cid, entre ellos sus hijas y su hijo muerto a temprana edad.





En la explanada situada frente a la fachada principal, en la que aparece una imagen ecuestre de El Cid Campeador, hay una estatua del Sagrado Corazón, y a la izquierda un monolito con leyenda alusiva al caballo Babieca. Coincide con el lugar donde una creencia tradicional considera que fue sepultado el animal.

Burgos




Seguimos a otro monasterio, la Cartuja de Miraflores, que visitamos con un guía muy bueno, Nicolás.




Es un monasterio de la Orden de los Cartujos edificado en una loma conocida como Miraflores, situada a unos 3 Km del centro de la ciudad de Burgos.




Es una joya del arte gótico final. En el conjunto destaca la iglesia, cuya portada occidental en estilo gótico isabelino, está decorada con los escudos de sus fundadores. El templo es de una sola nave, capillas laterales y ábside poligonal. La nave está cubierta con bóveda estrellada.





La portada de la iglesia se alzó en 1486 y fue ubicada originalmente en el lateral izquierdo del templo, proporcionando el acceso de los fieles directamente desde el exterior del monasterio. Está formada por arquivoltas apuntadas decoradas con vegetales, animales y algunos motivos figurativos humanos. La arquería está situada bajo un gran arco conopial con macollas. En el tímpano se representa el motivo de la Compasión de la Virgen, que conforme a los cánones iconográficos bajomedievales, presenta a la Virgen sentada sujetando con sus brazos a su Hijo muerto, y los símbolos de la luna y el sol sobre los brazos de la cruz.




El retablo mayor de la Cartuja fue tallado en madera por el artista Gil de Siloé y policromado y dorado por Diego de la Cruz con oro que procedía de los primeros envíos del continente americano tras el descubrimiento. Realizado entre 1496 y 1499, se trata sin duda de una de las obras más importantes de la escultura gótica hispana, por su originalidad compositiva e iconográfica y la excelente calidad de la talla, valorada por su policromía.





El conjunto de sepulcros reales también fue obra de Gil de Siloé por encargo de Isabel la Católica. Por una parte se encuentra colocado en el centro de la nave el sepulcro de Juan II e Isabel de Portugal, que tiene forma de estrella de ocho puntas. En el lado del Evangelio de la iglesia está colocado el sepulcro del infante Alfonso de Castilla. Ambos sepulcros fueron realizados en alabastro y son joyas de la escultura del gótico tardío.




Tras la visita a la Cartuja de Miraflores hemos ido a comer; había varias opciones, yo elegí de primero ensaladilla rusa, de segundo carrillera y de postre arroz con leche, vino y agua.

Ya por la tarde tras el almuerzo hemos visitado el Monasterio de las Huelgas, francamente impresionante. Aunque se podía fotografiar por fuera, lamentablemente estaban prohibidas las fotos en su interior. Seguimos con el guía Nicolás, muy bueno como ya he apuntado.




El Monasterio de Santa María la Real de las Huelgas, conocido popularmente como Monasterio de las Huelgas, situado en la ciudad de Burgos, es un monasterio de la Congregación de Monjas Cistercienses de San Bernardo. Fue fundado en 1187 por el rey Alfonso VIII de Castilla y su esposa Leonor de Plantagenet que elevaron al Papa Clemente III la petición para fundar y consagrar el nuevo monasterio, petición que fue concedida de inmediato. Alberga obras de gran valor, entre ellas algunas de las vidrieras más antiguas de España.




La abadesa de Las Huelgas llegó a disfrutar de una autonomía y poder tan elevados que estaba por encima de la curia episcopal, dependiendo directamente del Papa. La abadesa, como mujer, no podía confesar, decir misa, ni predicar, pero era ella quien daba las licencias para que los sacerdotes hicieran estos trabajos. Era dueña de un señorío material y un señorío jurídico. El señorío material estaba compuesto por 54 villas, tierras, molinos, exenciones fiscales de pontazgo, portazgo y montazgo. Todos los privilegios se mantuvieron intactos a través de los siglos hasta el XIX, en que fueron suprimidos por el Papa Pío IX.

En la actualidad el monasterio está gobernado por monjas cistercienses. La abadesa actual no tiene mandos ni privilegios especiales civiles ni jurídicos. Tanto ella como la comunidad de monjas dedican su vida a la oración y a atender unas mínimas posesiones.




Es sabido que uno de los principales motivos que impulsó al rey Alfonso VIII de Castilla a edificar este monasterio fue el de convertirlo en panteón de reyes, y aquí está enterrado él junto a su esposa Leonor de Plantagenet, hija de Enrique II de Inglaterra y Leonor de Aquitania, así como hermana de Ricardo I “Corazón de León” y Juan I “Sin Tierra”.




Llegamos al hotel Puerta de Burgos, un auténtico 4 estrellas, a las 18:30. Me han dado la habitación 712, amplia y confortable con un baño magnífico. Tengo a Pedro al lado en la 711.

La cena fue a las 20:30, de primero tallarines a la carbonara bastante aceptables, aunque muy alejados de los espaguetis carbonara que modestamente cocina quien suscribe; de segundo merluza con patatas panaderas muy rica y de postre buñuelos con chocolate, vino y agua. 

Jueves, 23 de septiembre

Primero visitamos el museo de la evolución humana, francamente interesante que recorrimos detalladamente en sus dos plantas y luego nos dirigimos a la catedral de Burgos, en ambos casos con el magnífico guía Nicolás.

El Museo de la evolución humana, también conocido por sus siglas MEH, ha sido diseñado por el arquitecto Juan Navarro Baldeweg.

Fue integrado en la declaración de los yacimientos de Atapuerca como Patrimonio de la Humanidad en 2015, cuando se catalogaron por la UNESCO como “lugar de valor universal excepcional” y se incluyeron las infraestructuras de investigación y divulgación asociadas a los yacimientos.

El proyecto nace vinculado a las necesidades de conservar, inventariar y divulgar los restos arqueológicos procedentes de los yacimientos de la sierra de Atapuerca, constituyendo un referente internacional en relación con el proceso evolutivo del hombre en sus aspectos ecológicos, biológicos y culturales en secuencia cronológica.

La Catedral de Burgos

Cuando salimos del museo seguimos a pie hasta esta maravillosa catedral que recorrimos detalladamente en su interior siguiendo atentamente las explicaciones que nos fue dando Nicolás.




Quien haya visitado las grandes catedrales españolas, Burgos, León, Toledo, Sevilla, Santiago… seguramente no sabría decir cuál de ellas admira más. Yo tengo mis preferencias, pero me las quedo para mí.

Al llegar hasta aquí, me planteé cómo incluiría la descripción de la catedral de Burgos en este relato de nuestro viaje. Las posibilidades eran muchas, pero la gran extensión del texto sobre la catedral en la mayoría de las fuentes que consulté, me llevó a elegir la más condensada que encontré aunque su extensión también es importante, pero creo que la catedral de Burgos se merece sobradamente que gastemos unos pocos minutos en aprender algo sobre ella.




Así pues, el texto que transcribo a continuación pertenece en su integridad a la web https://www.rutasconhistoria.es/loc/catedral-de-santa-maria-de-burgos

La Catedral de Santa María de Burgos es un templo dedicado a la Virgen María situado en la ciudad de Burgos, aunque su nombre oficial es Santa Iglesia Catedral Basílica Metropolitana de Santa María de Burgos.




La Catedral de Burgos es una de las obras cumbres del gótico español y  la primera que representa la arquitectura gótica clásica en España. La Catedral sustituyó a la iglesia románica que la precedió, compuesta de tres naves, promocionada a finales del siglo XI por Alfonso VI para dedicarla a la Virgen María. Según consta en los archivos el monarca donó este lugar que había pertenecido a su padre Fernando I, donde había un palacio y una pequeña Iglesia que estaba en ese momento en construcción. Esta iniciativa de hacer un templo mucho más grandioso que el anterior fue idea del Obispo D. Mauricio que en sus viajes admiró obras similares en Francia.




La primera piedra se coloca el 20 de Julio de 1221, con la presencia de sus promotores el rey Fernando III de Castilla y el obispo Mauricio aunque se desconoce la identidad del primer maestro de la catedral por el modo de construir pero sí se sabe que era francés porque conocía la Catedral de Bourges, ya que la cabecera es parecida a la primitiva Catedral de Burgos. Pero algunos investigadores dicen que fue el canónigo Johan de Champagne seguramente llevado por el Obispo Mauricio.




La catedral comienza a construirse por la cabecera  y el presbiterio justo donde la ladera se empina en el cerro que va al Castillo. Sobre el año 1240 las obras las siguió el Maestro Enrique, también de origen francés, avanzando con bastante rapidez. Para el año de la muerte del fundador, 1238, que se encuentra sepultado en el presbiterio, se terminaron prácticamente la cabecera, las naves y  parte del crucero. Aunque el primer oficio se venía realizando desde 1230 el templo se terminó en 1260.

En la catedral gótica de Burgos  hay dos fases claras: una de estilo gótico clásico  de los primeros maestros  entre los siglos XIII y XV y la otra de estilo gótico flamígero, realizada por la familia Colonia. Entre la segunda mitad del siglo XIII y principios del XIV se completan las capillas de las naves laterales y se construyó un nuevo claustro.




Se realizan entre el siglo XV y el XVI varias modificaciones y se le da un nuevo impulso con la aportación de Juan de Colonia, con piedra caliza extraídas de canteras de la zona, entre ellas el cimborrio que posee una bóveda estrellada con plementería calada, las agujas de la fachada principal y la Capilla del Condestable de Castilla, al ampliar la capilla radial central de la girola, para construir su cámara funeraria.

Ya a partir del XVIII se modificaron las portadas de estilo gótico de la fachada principal, la Sacristía y la Capilla de Santa Tecla.

Consta de tres cuerpos rematados por dos torres laterales de planta cuadrada. Del siglo XV son las agujas caladas de influencia alemana también de Juan de Colonia.  Es un edificio abovedado en su totalidad con crucería simple excepto los tramos cercanos  al crucero que tiene crucería estrellada, con un nervio de  espinazo en  longitudinal referente al templo. Encima de los arcos hay un bonito triforio, línea de huecos abiertos que dan a las naves laterales cerrado al exterior.

Durante siglos ha acumulado todo tipo de obras de arte: retablos, pinturas, orfebrería, sepulcros monumentalizados de escultores, pintores y arquitectos reconocidos como Juan de AnchetaJuan de VallejoJuan Pascual de MenaMateo Cerezo entre otros muchos.

Resaltan en su interior tres elementos,  la Capilla de los Condestables, el cimborrio por su gran belleza, de estilo plateresco y la Escalera Dorada realizada por Diego de Siloé.




La Capilla del CondestableO también llamada Capilla de la Purificación de la Virgen en la que trabajó la familia Colonia es de estilo gótico isabelino, sustituye la capilla primitiva gótica dedicada a San Pedro. La nueva como panteón familiar fue encargada a Pedro Fernández de Velasco y Mencía de Mendoza y Figueroa.

Simón de Colonia comenzó las obras en 1482 y adaptó el solar bastante irregular para construir un espacio con bóveda estrellada octogonal, la obra se completa en 1517 con la sacristía hecha por su hermano Francisco.




La reja de la entrada está considerada una obra maestra  de Cristóbal de Andino.

Tiene un retablo realizado entre 1523 y 1526 obra de Diego de Siloé y Felipe Bigarny con esculturas de tamaño original, León Picardo hizo la policromía del retablo.




Hay varios sepulcros góticos que los condestables respetaron al construir la suya en la primitiva capilla de San Pedro, estos corresponden a los obispos Pedro Rodríguez de Quexada y Domingo de Arroyuelo.




En el centro de la Capilla, labradas en mármol de Carrara están las estatuas yacentes de los condestables  Pedro Fernández de Velasco y Mencía de Mendoza.

En cuanto a pintura, en esta capilla destaca el cuadro del Giampietrino discípulo de Leonardo da Vinci“La Magdalena”.

El Cimborrio:   De estilo gótico plateresco del siglo XV reconstruido por el arquitecto Juan de Vallejo en el siglo XVI. Es el punto donde se cruzan la nave principal y el crucero, es decir, en el mismísimo centro de la catedral; sin embargo, este no es el cimborrio original, ya que en el siglo XV, se levantó una tercera torre en el centro del templo edificada por Juan de Colonia exageradamente elevada, con columnas y coronado por ocho chapiteles, que acabó derrumbándose, encargándose ese mismo día uno nuevo al arquitecto  Juan de Vallejo. Consta de ocho lados y dos pisos, y se sujeta con cuatro robustos pilares rematados  por cuatro espectaculares agujas. Los lados de cada piso tienen  ventanales grandes que iluminan el centro de la catedral. Bajo el cimborrio, en el suelo de la catedral, está la tumba de Rodrigo Díaz de Vivar el Cid Campeador y de su esposa Jimena




La Escalera Dorada: A la hora de construir la Catedral hubo un gran problema al encontrarse en las faldas de un cerro por lo que existía un gran desnivel entre la ladera norte y la sur, por ello entre la planta de la Catedral y la puerta norte se mandó construir en 1519 una escalera en sustitución a la derribada tres años antes; el encargado fue Diego Siloé. Esculpida con motivos vegetales y animales que se distribuyen a lo largo de muros y arcos y terminada con una barandilla de hierro de una gran belleza obra de Hilario en 1526. Hoy en día solo se utiliza el jueves y viernes Santo iluminándola con una gran cantidad de velas.

Además, hay que reseñar los siguientes elementos:

La Sillería del CoroRealizada por Vigarny de estilo renacentista.




El Santísimo Cristo de Burgos: Imagen con una gran tradición. Fue propiedad del Real Monasterio de San Agustín situado fuera de los muros de la ciudad. Muy venerada desde antiguo los comerciantes fundaron capillas bajo su advocación sobre todo en Brujas y Amberes, casi no había catedral que no tuviera una capilla consagrada a él. De largas melenas, cuerpo ensangrentado y, sobre todo, unos faldones que le cubren casi por entero las piernas.




El Papamoscas: Situado en lo alto de la nave mayor sobre el triforio, a las horas en punto abre la boca al tiempo que mueve su brazo derecho para accionar el badajo de una campana. Es una figura de medio cuerpo que se asoma sobre la esfera de un reloj. La mejor hora para verle es a las doce del medio día cuando da doce golpes y abre y cierra la boca doce veces. Desde la época medieval existían relojes en la Catedral.

En el exterior los principales grupos escultóricos son de estilo gótico en las portadas y la Galería de los Reyes:




Las agujas de la fachada principal: La imagen más extendida de la catedral de Burgos, es la de su fachada principal con sus desafiantes agujas elevadas hacia el cielo. Juan de Colonia fue el encargado de construir las dos agujas más famosas de todo el arte gótico español, miden 79 m de alto y se componen de calados como encaje según copia de modelos alemanes. Esta fachada tiene cuatro plantas:

- En la primera, donde está la entrada, es una reconstrucción no muy lograda del siglo XVII, de entonces solo hay cuatro estatuas originales.

- La segunda planta, tiene una balconada corrida con un gran rosetón con el sello de Salomón.

- En la tercera planta, tenemos la Galería de los Reyes, porque aparecen estatuas de los Reyes de Castilla.

- La cuarta planta, es donde están las dos torres rematadas por las agujas.

La puerta del Sarmental: Construida entre los años 1235-1240, también se valora como la primera manifestación escultórica genuinamente gótica, aunque no exenta de arcaísmos iconográficos, es el elemento más destacado del exterior

En el tímpano está representado Cristo en Majestad bendiciendo con su mano derecha y en su mano izquierda el  Libro de la Vida. Se encuentra rodeado por Tetramorfos. En la parte superior y extremos están los cuatro evangelistas escribiendo sus enseñanzas sobre pupitres en los Evangelios. En la jambas hay dos grupos de estatuas, Aarón y Moisés a la izquierda y  San Pedro y San Pablo a la derecha. Las arquivoltas muestran ángeles, ancianos, y las alegorías de las artes liberales.

Es una puerta construida por artistas extranjeros se cree que procedentes de Amiens y de Reims.

En su parteluz hay una estatua medio derruida de un Obispo desconocido, aunque se piensa que puede ser el Obispo Mauricio.




Puerta de la Coronería o de los Apóstoles: Esta puerta se abre a la calle por donde llegan los peregrinos del Camino de Santiago, está sobre elevada con respecto al nivel del templo, se encuentra en alto y se comunica con la Escalera Dorada.

Fue construida hacia el año 1245, siendo una obra preciosa reformada en el renacimiento. En el tímpano se representa el Juicio Final y bajo este tenemos el dintel donde se desarrolla el Juicio.  En las jambas, el Colegio Apostólico, motivo normal en la iconografía de este tipo de puertas.

Nos podemos hacer una idea de cómo era esta fachada viendo la de la catedral de León.

La Puerta del Claustro: Comunica el claustro con el transepto y es de finales del siglo XIII.

En el tímpano está representado el Bautismo de Cristo y encima de la cabeza de Jesús aparece una voluminosa paloma en representación del Espíritu Santo. En la jambas a la derecha tenemos al rey David e Isaías y al otro lado una escena de la Anunciación de la Virgen y el Arcángel.

En las arquivoltas se colocaron las estatuas de diversos personajes del Antiguo Testamento que forman parte de la genealogía de Cristo.

La escultura de esta puerta manifiesta una enorme evolución en el recorrido de la escultura gótica hacia el naturalismo. Son figuras monumentales, no estilizadas. El tratamiento de las telas y los rostros es muy naturalista.

Galería de los Reyes: Está por encima del rosetón en la fachada principal, con estatuas de ocho reyes coronados y de gran finura escultórica.

Claustro:   Comenzó a construirse a finales del siglo XIII, es de estilo gótico, y se sitúa entre la girola y el brazo sur del transepto  al suroeste del templo, y fue terminado a principios del siglo XIV. Tiene dos pisos  y cuatro galerías con preciosas arquerías. En él hay gran número de monumentos funerarios para las altas esferas del clero.

La catedral de Burgos fue declarada el 8 de Abril de 1885  Monumento Nacional y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco el  31 de Abril de 1984. Es la única catedral española que tiene esta distinción de forma independiente, sin estar unida al centro histórico de una ciudad  o con otros edificios.

Está considerado el templo católico de mayor rango en Castilla León ya que es el único que es catedral metropolitana  a la vez que basílica

Para quien quiera ampliar lo escrito en este relato sobre la catedral de Burgos, puede hacerlo en otras dos webs:

https://es.wikipedia.org/wiki/Catedral_de_Burgos

https://www.guiasturisticosburgos.com/catedral-de-burgos.html




Un último apunte que no quiero que se me quede en el tintero. Por lo que siempre aprendí desde niño acerca de El Cid, me impresionó particularmente que bajo el cimborrio, una sencilla losa de jaspe rojizo cubre los restos de Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador, y de su esposa doña Jimena. Allí fueron trasladados desde el monasterio de San Pedro de Cardeña en 1921, coincidiendo con el VII Centenario de la Catedral. Una inscripción en letras doradas, creada por Menéndez Pidal, nos recuerda que allí está enterrado Rodrigo Díaz Campidoctor, el que en buena hora nació.

Hemos comido a las 13:30 en el restaurante Don Nuño, frente a la catedral, de primero sopa castellana, de segundo filetes de lomo de cerdo con patatas y de postre un corneto industrial, vino y agua.




Tras la comida, Pedro y yo, acompañados por el matrimonio de Emilia y Pedro nos tomamos unos cafés sentados tranquilamente haciendo tiempo hasta la salida del autobús a Madrid.

Por la tarde a las 16:00 salimos hacia Madrid, donde tras una parada en el camino llegamos a las 18:15, tomé un taxi y llegué a casa sobre las 19:00 horas.

¿Qué más puedo añadir? Cuando hablábamos por teléfono Pedro y yo, los dos comentábamos las enormes ganas que teníamos de poder hacer una excursión “larga”, como ha sido esta. Tras el aperitivo que supuso nuestro viaje de dos días a la provincia de Cuenca en el mes de junio y que rompió 15 meses de sequía sin excursiones en la Hermandad a causa del Covid 19, éste de ahora del Camino francés ha sido como una bendición en todos los sentidos. Ha estado magníficamente organizado; de nuevo, aunque me repita relato tras relato, mis felicitaciones al Grupo de Viajes de la Hermandad con nuestra Vocal Elena Romero al frente; nos ha permitido reencontrarnos, confraternizar y disfrutar durante toda una semana a un grupo de viajeros habituales que estábamos deseando poder intercambiar nuestras opiniones y deseos. Punto final pues a este artículo y deseando ya poder iniciar otro.

Las Rozas de Madrid, 7 de octubre de 2021

Juan José Alonso Panero